En mi cuarto alejado de la contaminación, sombrío carente de presencias solos tu, yo y las paredes blancas. tu sonrisa en ella por cada rincón, por cada parte donde le observe, acompañado del perturbador gemido de tus expresiones ensordecido por tus gritos álgidos bañados en ese liquido que emana de los dos y que funde nuestros sentidos en uno solo lubricando nuestra piel en una danza gloriosa.
El placer se puede inhalar se puede ver el humo cubriéndonos en un manto que oculta allí nuestra intención, nuestra lujuria, pues allí hemos de pecar con los ojos cerrados pues no queremos descubrir que no es mas que un placer vago el sentir de esta dulce obra en la que nos mentimos con solo tocarnos y acariciarnos pues bien se sabe que aquí no hay sentimientos que esto es una farsa donde escapamos y olvidamos de lo que nos hizo daño.
Intimidad desvaneciendo con las caricias indecentes aquello que privas del mundo y verse liberado en tan solo unos instantes por el efecto de la endorfina, tu voluntad no es tan fuerte y eso que le privas a la mayoría a oscuras te lo sirves como parte del banquete para seducir al olvido.
El placer se puede inhalar se puede ver el humo cubriéndonos en un manto que oculta allí nuestra intención, nuestra lujuria, pues allí hemos de pecar con los ojos cerrados pues no queremos descubrir que no es mas que un placer vago el sentir de esta dulce obra en la que nos mentimos con solo tocarnos y acariciarnos pues bien se sabe que aquí no hay sentimientos que esto es una farsa donde escapamos y olvidamos de lo que nos hizo daño.
Intimidad desvaneciendo con las caricias indecentes aquello que privas del mundo y verse liberado en tan solo unos instantes por el efecto de la endorfina, tu voluntad no es tan fuerte y eso que le privas a la mayoría a oscuras te lo sirves como parte del banquete para seducir al olvido.
By Andrés Arana
@SiendoPoeta
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Luxuria #1