Extraño el mundo que podía que ver cuando ella se encontraba justo a mi costado, extraño el clima extrovertido de su humor; cuando le miraba fijamente se producían las sonrisas que dibujan esa felicidad y las miradas fijas atónitas por el baile frenético del corazón, que tanto extraño. Te extraño, felicidad no sabes cuanto he pensado en ti, has de imaginar los días y que los colores junto con el tiempo se va perdiendo, se va como si nada, como si ya no tuviera valor alguno, como si poco le importase ya nuestro destino o tal vez nuestro futuro o más bien, el futuro de cada uno...
Qué tan difícil es de imaginar que tu corazón le falte la alegría con cada palpitar púes ya lo hace por simple orden más no por un sentimiento, ese sentimiento que vibraba dentro y te sacudía, que permitía volar y sentirlo sin tener alas, sin volar en avión o sin pensarlo tan si quiera...
Así estoy yo, y sabes, te extraño mucho felicidad...
Qué tan difícil es de imaginar que tu corazón le falte la alegría con cada palpitar púes ya lo hace por simple orden más no por un sentimiento, ese sentimiento que vibraba dentro y te sacudía, que permitía volar y sentirlo sin tener alas, sin volar en avión o sin pensarlo tan si quiera...
Así estoy yo, y sabes, te extraño mucho felicidad...
Te extraño, felicidad...