Verte y mirar a tus ojos claros, descubrir sin dudas lo bellos que son aunque se le sienta fría e insípida transmitir ese vació, una soledad inquietante...Hipnotiza el misterio que proviene de tus huellas en la arena, púes en el seno de ellas se levantan orgullosos los cristales que florecen como prueba en la historia de un pasado cruel y despiadado.
Delgados y finos labios le adornan el rostro al cual la belleza le apremia y viste en su piel de escama un color tenue agradable a los ojos del cauto. El rostro esculpido delicado de fino toque expresado y un caos en su corazón nublado, ha de jugar a engaños con su bien amado; Una historia envuelta en mantos ensangrentados y deseos mundanos; El espíritu voraz insaciado de placer y mil corazones por caer...
Una mujer experta en hipocresía a ¿quien podría negar a tu sonrisa la reverencia? sí tu imagen virginal doblega el corazón humano más puro, sin duda una mujer letal y lesiva, adictiva y venenosa con su ego e hipocresía...
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Ella, ego e hipocresía